En junio de 2025, Taylor Swift recuperó oficialmente los másteres de sus primeros seis álbumes. Pero, ¿por qué esto es tan importante? ¿Y qué tiene que ver con la propiedad intelectual? Te lo explicamos en detalle, con reglas que también aplican en Argentina y en cualquier industria creativa.
¿Qué son los másteres y por qué son tan importantes?
En la industria musical, los másteres (o master recordings) son las grabaciones originales de una canción o álbum, a partir de las cuales se hacen todas las copias, distribuciones y licencias.
Quien posee los másteres tiene el control económico de la obra grabada.
Por ejemplo, puede decidir:
🎬 Si una canción aparece en Netflix.
📺 Si puede usarse en una publicidad.
📱 En qué plataformas se distribuye o retira del streaming.
🎧 Qué versiones son autorizadas a reproducirse.
El conflicto: ¿cómo Taylor Swift perdió y recuperó el control?
Cuando Taylor firmó con Big Machine Records, no tenía control sobre sus másteres. En 2019, la disquera fue vendida a Scooter Braun, quien adquirió los derechos de sus primeros seis discos (desde Taylor Swift hasta Reputation). La artista denunció públicamente no haber tenido la oportunidad de comprar sus propios másteres antes de esa venta. En respuesta, inició una estrategia legal y creativa: regrabar sus álbumes bajo el sello «Taylor’s Version», utilizando sus derechos como compositora e intérprete para generar nuevas versiones de sus obras.
¿La respuesta de Taylor?
Regrabó todos los discos con el sello “Taylor’s Version”. Legalmente, como autora e intérprete, pudo hacer nuevas grabaciones y recuperar así el control comercial y simbólico. En 2025, finalmente obtuvo los másteres originales, que incluyen:
🎼 Canciones y demos no publicadas,
🎬 Videoclips,
🎤 Conciertos grabados,
📸 Portadas y material gráfico,
©️ Derechos de sincronización y licencia.
¿Qué derechos están en juego? Análisis desde la propiedad intelectual
El caso implica distintos tipos de derechos que conviven en una obra musical:
- Derechos de autor: como compositora, Swift ya era titular de estos derechos sobre las letras y melodías. Tiene derechos morales (ser reconocida como autora) y derechos patrimoniales (cobrar por el uso de la obra).
- Derechos conexos: como intérprete, tenía derechos sobre su ejecución vocal, aunque no sobre las grabaciones originales.
- Derechos sobre fonogramas (másteres): los másteres pertenecen al productor fonográfico (la discográfica), salvo acuerdo en contrario. Por eso, la negociación o recuperación de esos derechos es clave para controlar el futuro de la obra grabada.
Al recuperar sus másteres, Swift ahora puede decidir sobre la totalidad del ciclo de explotación de su obra: sincronizaciones, licencias, remasterizaciones y plataformas. Los másteres estaban en manos del productor fonográfico (la discográfica), hasta inicios de junio de 2025.
Si estas en el mundo de la música, este contenido puede ser de mucha utilidad, con infomación clave: Música y propiedad intelectual.
Taylor Swift: una lección para el ecosistema creativo
El caso de Taylor Swift muestra que el control sobre los derechos de propiedad intelectual no es un detalle técnico: es una decisión estratégica con consecuencias legales, económicas y artísticas.
Para artistas, emprendedores creativos y profesionales del derecho, este episodio deja varias lecciones clave:
- Leer y negociar los contratos desde el inicio.
- Registrar correctamente los derechos de autor y conexos.
- Conocer las alternativas legales cuando se pierde el control de una obra.
- Valorar la propiedad intelectual como un activo central del negocio creativo.
Conclusión
La estrella estadounidense, Taylor, no solo regrabó sus álbumes: reescribió las reglas de poder entre artistas y discográficas. Su caso es un ejemplo de defensa inteligente de los derechos intelectuales y de cómo la autonomía creativa también se construye desde lo legal.
Este caso puede inspirar a nuevos creadores a proteger sus obras desde el primer momento, entendiendo que la propiedad intelectual no es solo un respaldo legal, sino una herramienta de empoderamiento artístico y económico. En Eguía disponemos de un equipo preparado para defender tus derechos y creaciones.